Aunque el Dr Bach era un doctor de la medicina alópata,- en la cual no se reconoce la importancia de escuchar a nuestra alma para la salud de nuestro organismo- en la filosofía Bachiana es de gran importancia.
Bach nos dice “Para evitar las enfermedades, solo hace falta escuchar la voz interior de nuestra alma, y vivir en armonía entre nuestra alma y nuestra personalidad.”
El alma ha sido de gran estudio de diversas filosofías y culturas, entre ellas las que se complementan con la visión del Doctor Bach es la cultura védica, donde se entiende que el alma no muere, es siempre eterna; lo sabe todo, es consciencia y también tiene la cualidad de ser bienaventurada o de estar en alegría en consciencia de la gran divinidad.
Es entonces, la sabiduría védica complementaria a los postulados del Dr Bach, comprendiendo que uno debe hacer caso a nuestra alma.
Hay algunos filósofos que han mal entendido esta invitación, observando y comprendiendo desde una mirada egocéntrica, egoísta y además llena de deseos mundanos.
Por el contrario, todo esto tiene que ver con la personalidad.
Antes de comprender la filosofía de Bach, debemos limpiar nuestra mente de todos esos preconceptos e ignorancia que nos ha entregado nuestro sistema de creencias -impuesto-, donde hemos sido desconectados de nuestra verdadera sabiduría. Para ello, debemos comprender que nuestro ser tiene tres dimensiones muy importantes a incorporar: Cuerpo, Mente y Alma.
Entre ellos, para Bach el Alma es lo más importante y a la vez puro. Sin embargo, cada uno de nosotros tiene un tipo de personalidad, es esta personalidad la que conocemos como Ego. Nuestro ego, son todo aquello que creemos ser, lo que nos identifica. ¿Quién eres?.
Sin embargo, el ego no es lo que realmente somos, sino que es nuestra cubierta o cobertura social, es aquello que estamos experimentando Ser.
El alma en cambio, podrás cambiar las vestiduras de tu cuerpo, sin embargo, siempre prevalecerá. Es aquello que te permite estar viv@, es esa diminuta particula de vida que ha sido depositada en cada uno de nuestros corazones y es lo que permite el funcionamiento de todo nuestro organismo.
¿Has pensado? Cuando llega la muerte, muchas veces puede estar todo el cuerpo físico, todo nuestro organismo… Sin embargo, hay algo que no está y se ha ido, dejando que el corazón no bombee más sangre, ni funcionan los pulmones, etc.
Aquello que permite la existencia y la vida, es nuestra Alma.
Se ha estudiado que cada vez que una persona muere pierde exactamente 21 gramos.
Entonces, en la filosofía Bachiana, quienes estamos siendo es externalizado por nuestra personalidad y nuestra personalidad debe estar en constante conexión con el centro de nuestro corazón, donde se sitúa nuestra Alma.
El Alma contiene todo el material de información que necesitamos y también tiene todo el material que aún no sabemos. ¿Te imaginas? Tu alma es un reservorio de energía, conciencia y sabiduría que sabe a qué viniste al planeta, sabe tus recuerdos kármicos, cual es tu dharma, cuál es el origen de tu existencia y cual es el plan en esta encarnación.
Es gracias al principio de Chit -consciencia- que podemos llegar a interiorizarnos en nuestros registros akáshicos y en nuestra gran sabiduría.
Cada vez que nos conectamos en meditación podemos llegar a escuchar la sabiduría de nuestra alma, guiándonos que es lo que debemos hacer, hacia dónde debemos ir. Sin embargo, si no la escuchamos y además la desobedecemos, nuestras emociones comienzan a ser inestables y nuestro organismo se comienza a enfermar.
Ahora bien, hay un tercer principio que es la Bienaventuranza o Ananda, esta gran cualidad que nos ha entregado la divinidad, es que nuestra Alma se siente feliz, es bienaventurada y el universo se expande cuando estamos vibrando en equilibrio con lo que nuestra esencia le atrae.
Este es el principio del que hablan muchos acerca de la resonancia electromagnética que puedes tener con tus sueños o anhelos, en este momento se está llevando a una visión capitalista o de bienes materiales, sin embargo, este gran principio es real y trascendental, nos puede llevar a proporcionar una vida saludable, llena de júbilo y tranquilidad.
Si escuchas a tu alma, tu existencia cambiará; es tu cuerpo un gran templo de esta alma; al ser escuchada y dignificada a través de prácticas de meditación o con la ingesta floral, nosotr@s nos volvemos más consciente de aquello que vinimos a realizar al planeta y cuales son los desafíos que nuestra alma debe atravesar.
¿Te imaginas una vida escuchando tu alma?
Qué harías si te dedicas realmente a la vida que quieres y resuena tu ser?
Desde hace cuanto tiempo que no te atreves a soñar ?
Estas son las grandes invitaciones de la Terapia Floral y del Doctor Bach, es una gran invitación a confiar en nuestro ser más íntimo y a volvernos discípulos de nuestra gran misión en este hermoso planeta.
Es escuchando nuestra alma que podemos hablar de sanación energética, emocional y real del ser viviente. La curación solo sana el cuerpo físico y de este modo, muchas personas vuelven y vuelven a desarrollar la misma patología, tal es el caso del cáncer o de la diabetes. Los operan, les sacan los tumores y luego vuelven a aparecer.
¿Qué es lo que nos está enseñando aquella enfermedad?
La enfermedad no es en sí misma mala, sino que es un mensaje a incorporar para nuestra sanación interna y así poder escuchar su verdadero mensaje para nuestra evolución.
¡Ahora ya sabes la importancia del Alma para la Terapia Floral !
Si tienes dudas o te interesa este tema, puedes dejarnos tu comentario y percepción!
Si eres terapeuta floral y no has comprendido la filosofía de Bach, ¡tenemos un curso especialmente diseñado para estos casos !
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